Resumen:
El turismo rural y comunitario en los poblados más alejados de las grandes ciudades
renueva la confianza de las personas involucradas con él, quienes tienen la posibilidad de
hacer de su labor diaria una actividad turística
que genera ingresos complementarios y mejora la calidad de vida. Estas posibilidades comienzan cuando las comunidades rurales se
sienten orgullosas de su cotidianeidad, lo que
constituye un gran atractivo para las personas
que buscan interactuar con la gente local y conocer otras culturas. La salida de la cuarentena
generada por el covid-19 y la apertura a la actividad turística plantean al turismo rural y comunitario como una de las opciones más elegidas
por ofrecer espacios abiertos, en contacto con
la naturaleza, y por trabajar con grupos reducidos de personas. Distintas iniciativas en Argentina, desde los organismos gubernamentales
y ONG, acompañan este proceso con documentos prácticos y otros materiales que pone
a disposición la virtualidad. El presente artículo
resume las herramientas disponibles y propone
un modelo de gestión participativa que puede
ser aplicada por técnicos en territorio, líderes
de proyectos, funcionarios y/o instituciones en
este proceso de reactivación de la actividad turística en entornos rurales.